Al correr, toma aire por la nariz en dos etapas suaves. Primero, llena los pulmones de manera parcial y luego completa la inhalación hasta sentir que tu abdomen se expande. Esta técnica ayuda a filtrar el aire, calentarlo y humedecerlo antes de que llegue a los pulmones, además de mantener un ritmo respiratorio más estable.
Después de inhalar, exhala lentamente por la boca, liberando todo el aire de los pulmones. Esto permite expulsar dióxido de carbono de manera más eficiente y evita la sensación de falta de aire. Mantener un flujo constante al exhalar también ayuda a relajar los músculos y mantener un ritmo de carrera uniforme.
Mayor oxigenación: Llenar los pulmones de manera controlada mejora la resistencia y reduce la fatiga.
Ritmo constante: Evitar respiraciones rápidas y superficiales ayuda a mantener un paso estable.
Prevención de mareos: Exhalar de manera completa evita acumulación de dióxido de carbono, disminuyendo la sensación de vértigo o mareo.
Practica la respiración mientras caminas antes de intentar correr.
Ajusta el ritmo de inhalación y exhalación a tu velocidad; no fuerces el aire.
Mantén la postura recta, hombros relajados y cabeza erguida.
Con constancia, esta técnica de respirar mejor al correr, te permitirá disfrutar más de tus entrenamientos, mejorar tu resistencia y sentirte más cómodo mientras corres. Respirar correctamente es tan importante como el esfuerzo físico al entrenar.
#Fhinix #RespiracionAlCorrer #RunningPrincipiantes #CorrerSaludable #TipsDeRunning #EjercicioConsciente #RunningLife #Fitness #CardioSaludable #MotivacionDeportiva